
Julio Olivo, magistrado presidente del TSE, declaró durante 4 horas ante la Fiscalía.
Después de las acusaciones que hizo Julio Olivo, presidente magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE), sobre un supuesto sabotaje en el proceso de transmisión de datos, la Fiscalía General de la República (FGR) tomó cartas en la denuncia y lo citó para que declarar hoy.
Al salir de las declaraciones, la cual duró 4 horas, Julio Olivo, dijo que había señalado a la empresa Soluciones Aplicativas, Salpic, como la responsable del sistema fallido y de los atrasos en el escrutinio final.
Sin embargo, la Fiscalía desmiente que el presidente magistrado haya denunciado a alguna persona o empresa, y además, considera que Olivo utilizó la palabra «sabotaje» refiriéndose a los problemas técnicos que hubo en la etapa final de los comicios del domingo.
El ministerio público confirmó que Olivo no presentó ninguna prueba del supuesto sabotaje. Tampoco lo hizo en el canal televisivo en donde ayer expresó que llevaría las pruebas para sustentar su denuncia.
El TSE se saltó el escrutinio preliminar por no confiar en el sistema y dijo que tardaría alrededor de 14 días en terminar el escrutinio final.
Fuente: EDH
