Israel rechazó un pedido de un alto cabecilla de Hamás de Gaza de viajar a Turquía, vía Israel, para recibir tratamiento médico, señalando el continuo aislamiento al que el grupo terrorista islámico mantiene sometido a un ciudadano israelí con problemas mentales, que está secuestrado en la Franja.
Ihab al Rasin, una alta figura del Ministerio de Información de Hamás, pidió al Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) permiso para ingresar a Israel, y de allí continuar a Jordania y luego a Turquía, reportó Gal Berger, corresponsal sobre asuntos palestinos de la radio estatal La Voz de Israel (Kol Israel).
Al Rasin se encuentra hospitalizado en Gaza a raíz de un virus no especificado, y debido a que su condición se deteriora rápidamente precisa tratamiento más avanzado en el exterior.
La Coordinadora de las Actividades del Gobierno en los Territorios (COGAT) –el departamento del ejército responsable de Cisjordania (Judea y Samaria) y Gaza- rechazó la solicitud. En cambio,
Uno de ellos, Abraham (“Avera”) Mengistu, un ciudadano israelí oriundo de Etiopía, tiene un largo historial de problemas mentales y de desaparecer por períodos prolongados. Hace cerca de un año, ingresó –aparentemente durante un episodio psicótico- a la Franja de Gaza, y fue tomado como rehén por el grupo terrorista islámico.
A pesar de los pedidos de la familia Mengistu, Hamás se niega a mostrar signos de que aún está con vida, o a permitir a las organizaciones humanitarias internacionales que tengan acceso a él. Tampoco le está suministrando los medicamentos que precisa.