Los manifestantes expresaron su apoyo a las investigaciones sobre corrupción en la estatal Petrobras, que salpican a un promedio de 50 políticos.
Miles de personas se concentraron en más de 20 ciudades de Brasil, para participar en una jornada nacional de protesta, exigiendo la destitución de la presidenta, Dilma Rousseff.
Las primeras movilizaciones se registraron en ciudades del norte y noreste, las regiones más pobres del país.
Los manifestantes expresaron su apoyo a las investigaciones sobre corrupción en la estatal Petrobras, que salpican a un promedio de 50 políticos.
En Belén, capital del amazónico estado de Pará, uno de los grupos desfiló por céntricas avenidas con una suerte de «carroza-cárcel».
Allí estaban encerrados muñecos que representaban a Rousseff y a su antecesor y padrino político, Luiz Inácio Lula da Silva, quien está investigado por supuesta corrupción.
Las protestas han sido convocadas por grupos de la sociedad civil vinculados a los partidos de oposición, que también han manifestado su respaldo a las movilizaciones.
fuente:voanoticias