
La meta para Irak continúa siendo un gobierno que represente a los chiitas, sunitas, kurdos y otras minorías del país.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, exhortó al primer ministro iraquí, Haider al-Abadi, que forme un nuevo gabinete tan rápido como sea posible y prometió apoyo a Irak en su lucha contra militantes del grupo Estado Islámico.
Kerry dijo a los periodistas en Australia, que la meta para Irak continúa siendo un gobierno que represente a los chiitas, sunitas, kurdos y otras minorías del país.
“El nuevo liderazgo iraquí tiene un muy difícil desafío. Tiene que recobrar la confianza de sus ciudadanos gobernando en forma inclusiva, pero también tomando medidas para demostrar su decisión y nosotros vamos a continuar respaldando al pueblo iraquí durante este tiempo de transición”, dijo Kerry.
No obstante, el primer ministro saliente, Nouri al-Maliki, se niega a dejar el cargo y argumenta que la designación de Abadi es legalmente inválida.
Por segundo día consecutivo, vehículos blindados de las fuerzas de seguridad que responden directamente a Maliki se encontraban estacionados en la llamada Zona Verde. Un tanque custodia la entrada principal al complejo de seguridad que alberga edificios gubernamentales.
El enfrentamiento político que pueda desarrollarse amenaza con la estabilidad de Irak y con la efectividad en el combate contra las milicias islamistas que intentan tomarse el país.
El secretario Kerry reiteró que no habrá un retorno de tropas de combate estadounidenses a Irak, destacando que el país enfrenta una lucha a la que deben unirse los iraquíes en representación de Irak.
El secretario de Defensa estadounidense, Chuck Hagel, calificó como buena noticia la selección de Abadi como primer ministro iraquí e indicó que EE.UU. espera trabajar con un nuevo gobierno una vez que esté en funciones..
VOA
